Katy Perry la reina indiscutible del pop
Enfundada en un minivestido negro, Duffy fue coronada anoche reina del pop británico. La galesa recibió tres premios Brit: el de mejor artista femenina, el de cantante revelación y el de mejor álbum británico por su debut Rockferry. El último lo recogió entre lágrimas. El primero diciendo: «Esto quiere decir que mi madre hizo bien en no tener un niño».
La gala -celebrada como de costumbre en el centro de congresos de Earl's Court-arrancó con la reaparición energética de U2 y se cerró con el dueto de Lady Gaga y los Pet Shop Boys, que recogieron el premio a toda una vida. No fueron por cierto los únicos veteranos de la noche. Paul Weller recibió el Brit al mejor artista masculino y Iron Maiden, sorprendentemente el de mejor banda en directo.
Las categorías internacionales las coparon como de costumbre artistas americanos. Mejor artista masculino fue Kayne West y mejor artista femenina fue Katy Perry, que acudió a la gala engalanada con lentejuelas pese a tener décimas de fiebre.
Presentó la gala una imponente Kylie Minogue, secundada por una pareja de humoristas británicos. Hubo un dueto algo deslavazado de Estelle con los Ting Tings y una actuación plumífera de las Girls Aloud, galardonadas por el codiciado premio a mejor canción del año. Pero lo más celebrado fue de nuevo la interpretación de Duffy, que enmudeció a la sala interpretando su Warwick Avenue, esta vez dentro de un interminable vestido rojo.
Comentarios
Publicar un comentario